martes, 15 de abril de 2008

Se llama Roberto Sánchez y por fumar, necesita un pulmón y un corazón

Sandro de América, el popular (en los 70s del s. XX) cantante argentino y protagonista de más de una decena de películas, vive rodeado de tanques de oxígeno, por su adicción al cigarro y espera un transplante salvador. "... mi amigo el Puma..." Qué pena.

5 comentarios:

Paxton Hernandez dijo...

Espero que los cuestionamientos a la ley antitabaco del DFecado cesen después de tu post.

Gracias.

Joel Meza dijo...

Habrá que mandarlo al Congreso... ah, espérame, están tomadas las tribunas...

@duendecallejero dijo...

Qué hermoso morir por el cigarro. Supongo que una cosa es cierta, este amigo jamás se arrepentirá de decir: sí, fumé ¿Y ahora?

Joel Meza dijo...

Bueno, de acuerdo a la nota, Sandro quiere dar a conocer su caso para prevenir a los jóvenes...
De oquis, pienso yo. La eterna historia de "Si no escuchan a Moisés y a los Profetas, tampoco se convencerán aunque uno de los muertos resucite..."

@duendecallejero dijo...

He wants a biopic? Eso le ayudaría a pagarse el tratamiento...

Este mundo tan comercializado...